El presidente del EBB del PNV, Andoni Ortuzar, ha denunciado este lunes «la instrumentalización político sindical» de esta pandemia de la covid-19 para el «acoso y derribo» del Gobierno Vasco, y ha asegurado a la izquierda abertzale que están dispuestos a negociar «hasta el último segundo». No obstante, ha precisado que, si no es posible el acuerdo, se recurrirá en el Parlamento Vasco a la mayoría absoluta que suman jeltzales y socialistas.
También ha lamentado la diferente actitud que, a su juicio, mantiene EH Bildu en Euskadi respecto a Navarra e incluso respecto a Madrid. «No sé qué tienen la moqueta madrileña o los ambientadores del Congreso porque allí respiran y espiran otro aire los dirigentes de la izquierda abertzale», ha afirmado.
En una entrevista concedida a Onda Vasca, el líder del PNV ha señalado que entiende que «haya mucha gente inquieta» porque es «completamente normal» que, en la situación que se vive y con la incertidumbre existente, «reaccione con nerviosismo e incluso con un punto de cabreo».
«No solo lo entiendo, sino que hay que aceptarlo. Los que tenemos responsabilidades públicas y políticas tenemos que aceptar que la gente proteste y se cabree», ha indicado.
No obstante, considera que «es más difícil de entender que se quiera pescar en río revuelto, que haya organizaciones, gente que crea opinión, que esté aprovechándose de ese caldo de cultivo, de esa incertidumbre, de ese cabreo entendible de una parte de la sociedad, para crispar artificialmente nuestro país», ha indicado.
A su juicio, «ya es suficientemente duro» lo que está ocurriendo y lo que se va a afrontar, «como para que, encima, se sume esa dosis de tensión, de confrontación, de pancarta estéril». «Porque las pancartas no mueven nada. Donde se mueven las cosas es en las reuniones», ha añadido.
Tras rechazar que ellos no se quieran reunir, porque hacen «un permanente esfuerzo de mano tendida y ofrecimiento de diálogo para sentarse en las mesas», ha recordado que la sociedad vasca «lo está pasando muy mal y no vienen tiempos ni meses fáciles».
Por ello, ha emplazado a sentarse alrededor una mesa, «en lugar de poner pancartas». «Es triste, pero hay declaraciones que oyes de algunos líderes sindicales, políticos, que da la sensación de que disfrutan con esta situación (generada por la pandemia)», ha manifestado.
Andoni Ortuzar ha recordado a quienes reiteran que «va a haber recortes sí o sí», después de que el Lehendakari, Iñigo Urkullu, y el consejero de Hacienda, Pedro Azpiazu, hayan insistido en que no los habrá y han explicado cómo «se saldrá de esta sin recortes sociales».
«Pues ellos, erre que erre. Parece como si quisieran que hubiera recortes. Cuando desde las instituciones decimos que no va a haberlos, ellos dicen que sí va a haber, como diciendo: ‘¡venga, anímate!, ¡atrévete!. Esa no es una actitud abertzale, patriota, que quiera a este país, a esta sociedad. Creo que hay que cambiar un poco el chip», ha subrayado.
El presidente del EBB ha asegurado que tampoco hurgarán «en las heridas del pasado», y ha aclarado que se conformaría con que, «de ahora en adelante», todos sean capaces de «sentarse en todas las mesas de diálogo y que cada uno defienda allí su posición política, sindical y sus reivindicaciones, pero con ganas de acordar, más que de confrontar».
Andoni Ortuzar ha reiterado que comprende «algunas de las situaciones que se están dando en el sector sanitario, educativo, etc, pero también habrá que entender la situación de la que se parte». «Los profesionales de la Sanidad, de la medicina, no salen como los champiñones en primavera, hay que buscarlos, hay que encontrarlos», ha destacado.
En este sentido, ha admitido que no es un proceso «fácil». «Estamos haciendo frente a una situación que nadie conocíamos y vamos mejorando», ha puntualizado.
Por ello, ha pedido «un poco de paciencia» a aquellos colectivos que piden «cosas justas» porque «esto no se soluciona de la noche a la mañana». «¡Qué más quisiéramos nosotros que todas esas situaciones desaparecieran!. Pero no es fácil buscarle soluciones. No es una cuestión de Euskadi. Miremos donde miremos en el mundo, la situación es parecida en los países más avanzados», ha remarcado.
Ortuzar ha reiterado que la situación, por ejemplo, en Euskadi y Navarra es muy similar y los protocolos y medidas que se han adoptado también. Sin embargo, ha indicado que en la Comunidad Autónoma Vasca ha habido huelgas, «hay una protesta continua, un volcarse contra el Gobierno Vasco y contra las instituciones vascas y, afortunadamente, en Nafarroa las cosas se están haciendo de otra manera, los que tienen que protestar, protestan, pero no hay huelgas, no se entorpecen los servicios públicos».
«Es difícil de entender por qué lo que aquí se hace, no se hace allí o, al revés, que la actitud positiva, de mano más tendida o de mayor comprensión que hay con las instituciones navarras, no la haya con las de la Comunidad Autónoma Vasca», ha admitido.
Todo ello le lleva a ser un poco «mal pensado», según ha declarado, y a considerar que hay gente que «está haciendo una instrumentalización política o político sindical de esta pandemia para ir a erosionar, a atacar a las recién creadas instituciones».
«Parece que algunos no se han quedado satisfechos con lo que pasó el 12 de julio (en las elecciones vascas), no les ha gustado lo que la gente ha decidido y quieren empezar ya, desde ahora, el acoso y derribo», ha remarcado.