Urkullu ha alertado a la ciudadanía de que la situación epidemiológica actual es de “extrema gravedad” y de que es posible que el efecto de las fiesta navideñas se sufra a lo largo de enero.
Urkullu afirma que hay “un claro estancamiento en la evolución positiva que se había experimentado desde principios de noviembre” y la evolución es “negativa y preocupante”.
La comisión técnica del Plan de Protección Civil de Euskadi (LABI) se reunirá mañana y el próximo lunes para controlar la evolución de la pandemia en Euskadi.