La Diputación Foral de Bizkaia ha presentado el proyecto inicial para cubrir la carretera BI-637 a su paso por Leioa, eliminando la trinchera que divide actualmente el municipio y los problemas de contaminación acústica de los y las vecinas cuyas viviendas están más próximas a la infraestructura. El diputado de Infraestructuras y Desarrollo Territorial, Imanol Pradales ha dado a conocer los detalles del proyecto provisional, que además de duplicar el espacio peatonal y de esparcimiento, contempla también la mejora y modernización de túnel.
El diputado ha subrayado la dificultad de actuar en uno de los puntos con mayor densidad de tráfico del territorio sin cortar el tráfico. Imanol Pradales ha puesto en valor que la solución propuesta no sólo es viable desde el punto de vista técnico, sino que es una solución integral. «Estamos, por tanto, ante una solución integral para Leioa: recuperamos superficie útil y segura para uso peatonal, con zonas verdes y de esparcimiento, arreglamos los problemas de ruido que soportan muchas vecinas y vecinos y, además, actualizamos la infraestructura. En definitiva, mejor calidad de vida. El proyecto que presentamos hoy integra las soluciones a los tres grandes problemas de esta zona. Y es, además, una solución viable, posible y factible», ha resumido el diputado.
- Se elimina la trinchera que divide actualmente Leioa
El cubrimiento de La Avanzada logrará unir el municipio de Leioa, salvando la actual división que provoca el paso a cielo abierto de la BI-637. Se recuperarán 4.132 metros cuadrados de superficie útil de uso peatonal en la zona más urbanizada de Leioa, duplicando el actual paseo hasta los 824 metros de longitud.
- Contaminación acústica
El cubrimiento de La Avanzada va a suponer una gran mejora en términos de contaminación acústica para las y los vecinos cuyas viviendas están más próximas a la infraestructura.
Se estima que en torno al 82% de las 2.900 vecinas y vecinos que actualmente está sometida a un impacto superior a 55dB en horario nocturno, estará por debajo de ese límite. Es lo que marcan los criterios de calidad acústica (definidos en el Decreto 213/2012 de contaminación acústica de la Comunidad Autónoma del País Vasco).
- Modernizar la infraestructura
El túnel de La Avanzada data de los años 80 y a pesar de que ha sido objeto de diversas actuaciones en los últimos años, el proyecto inicial aprobado por la Diputación Foral de Bizkaia contempla diversas mejoras en iluminación, ventilación y seguridad.
Además de las cubiertas transitables que salvarán la actual trinchera a cielo abierto, está previsto colocar dos cubiertas no transitables tanto en la boca sentido Getxo como en la boca sentido Bilbao. Estas cubiertas se dotarán de paneles de vidrio fotovoltaico para un óptimo aprovechamiento energético, que revertirá en el propio túnel disminuyendo así el consumo eléctrico previsto.
Además, se colocarán 860 metros de pantallas al borde de la calzada y 645 metros en mediana, todas ellas de 3 m de altura. Esta arquitectura con pantallas en el eje de la plataforma divide el foco emisor de ruido, de manera que es posible mantener una protección acústica elevada, limitando el impacto visual.
Imanol Pradales ha remarcado las dificultades de la actuación, que se prevé larga y costosa. Así, la inversión del proyecto inicial es de 62,5 millones de euros y 36 meses de ejecución. Está previsto que las obras puedan comenzar en 2023. «Mañana comienza el periodo de información pública y alegaciones. Tras el mismo, analizaremos las propuestas de mejora que se realicen y elaboraremos el proyecto definitivo que será la base para licitar las obras, de modo que podamos comenzar a intervenir en La Avanzada en el primer trimestre de 2023.», ha remarcado.
«Insisto en que estamos ante un proyecto viable. Y también me gustaría remarcar que para su elaboración se han estudiado todas las alternativas posibles. No hay que perder de vista que estamos ante una obra de una gran complejidad. La magnitud del propio proyecto es muy importante, con más de 700.000 kg de acero laminado en estructuras a ejecutar sobre viales en servicio y un total de 12 galerías de evacuación subterráneas que atraviesan las vías laterales y comunican el propio túnel con el exterior, además de las múltiples instalaciones necesarias para la correcta explotación del túnel. Ello obliga a una obra dividida en múltiples fases y subfases, generando islas de trabajo en un entorno muy constreñido por la propia urbanización existente y con una de las mayores densidades de tráfico de todo el territorio», ha detallado.