Las obras que abordarán la transformación integral de la calle Rodríguez Arias arrancan hoy. El Ayuntamiento de Bilbao inicia así unos trabajos que pretenden dotar a la vía de una renovada imagen urbana, moderna y elegante, con la intención de potenciarla como corredor comercial entre Abando e Indautxu, complementario a Gran Vía.
El objetivo es crear un nuevo espacio urbano de calidad, donde poder pasear, conversar, descansar y disfrutar de la experiencia del escaparate, siempre en equilibrio y respeto con la vida de los y las vecinas del entorno.
La transformación de la calle será integral ya que las obras abarcarán y pondrán en valor también las conexiones de Rodríguez Arias con Padre Lojendio, Gardoki, Telesforo Aranzadi y Máximo Aguirre.
Y se proyecta también con la mirada puesta en el futuro, con la premisa de conectar distintas calles del centro de la Villa y de recoger, además, los flujos de personas procedentes la estación de Abando, la actual y, sobre todo, la futura –soterrada e intermodal–.
Las obras se abordarán en fases, si bien se ha diseñado la vía entera en aras a la coherencia del proyecto.
En esta primera fase, cuyos trabajos son los que ahora arrancan, se urbanizará el tramo que discurre entre Alameda Rekalde y la Plaza Campuzano así como las conexiones con sus calles perpendiculares, esto es, las confluencias con Iparraguirre y Máximo Aguirre –esta última hasta Doctor Achúcarro–. En total, 6.000 metros cuadrados de superficie del ámbito.
Un tramo para el que se plantea una plataforma única, levantando el vial y colocándolo a la misma cota que la acera. Cuestión que podría posibilitar el cierre de la calle al tráfico rodado –salvo garajes– en ocasiones concretas y puntuales, como campañas especiales, rebajas…
En todo el ámbito de esta primera fase se ampliará el ancho de las aceras hasta los 4,5 metros y se generarán nuevos espacios estanciales. En consecuencia, se ampliará en casi 1.000 metros cuadrados el espacio destinado a uso peatonal, pasando de los actuales 3.040 a 3.957 de la situación proyectada.
Para lograr una imagen de la calle, elegante y moderna, y que ésta se extienda tanto al pavimento como al mobiliario urbano y al alumbrado, se han elegido materiales nobles como el granito (en el pavimento), la madera, el hierro fundido y la piedra (en el mobiliario), así como unos elementos de alumbrado vanguardistas.
El pavimento de granito será de tres tonalidades, gris claro y oscuro y rosa, y esta mezcla cromática permitirá crear un juego de ondas que definirán las distintas zonas que se sucedan en la acera. Mientras, el arbolado jugará un papel importante en la definición de espacios estanciales. Dos han sido las especies elegidas, una verde de tamaño medio para las aceras, el arce; y otra de tonos rojizos para los cruces de calles, el árbol de Jupiter.
Respecto al mobiliario urbano, éste será de corte clásico y adaptado a la Ley de Accesibilidad de la CAPV. Variará ligeramente en los cruces, donde se habilitarán jardineras en acero corten algunas de las cuales incorporarán banco, lo que contribuirá a dotar de un carácter semi-estancial a estos espacios.
Los alcorques irán a juego con las jardineras y los bancos tendrán estructura de fundición y acabado en madera de elondo. Se alternarán dos tamaños de banco (de 1,80 metros y de 55 centímetros de longitud, respectivamente), presentándose en diferentes combinaciones a lo largo de la calle.
El alumbrado, por su parte, se adecuará también, a la nueva estética de la calle. El alumbrado en fachada se eliminará en su totalidad y las luminarias se bajarán a suelo.
Se ha diseñado un alumbrado elegante y funcional para las zonas de acera y vial. Para ello se ha elegido un modelo nuevo en Bilbao, que aportará personalidad y singularidad a Rodríguez Arias.
PRESUPUESTO Y SUBVENCIÓN
Esta fase de la obra cuenta con un presupuesto de 2.081.323,36 euros (sin IVA) y un plazo de ejecución de ocho meses.
Hay que destacar que el Ayuntamiento de Bilbao recibirá para este proyecto 619.835 euros de subvención europea dentro de la Convocatoria de Ayudas para el Fortalecimiento de la Actividad Comercial en Zonas Turísticas.