El año pasado, un total de 265 sociedades mercantiles que tenían su sede en la Comunidad Autónoma Vasca optaron por cambiar su domicilio a otras comunidades. Por el contrario, 200 empresas realizaron el movimiento opuesto. En consecuencia, estos cambios dejaron un saldo negativo de 65 empresas en Euskadi, registrando el peor dato desde el año 2017.
Es llamativo que la pérdida de empresas registrada en 2024 duplica a las contabilizadas en 2023, cuando se produjeron un total de 32.