La portavoz del Gobierno Vasco, María Ubarretxena, y el consejero de Seguridad, Bingen Zupiria, han hecho balance de las consecuencias del apagón y han dado cuenta de la situación de cada sector. Según han explicado, en Euskadi los principales problemas se dieron en el sector ferroviario y en el arranque de la industria electrointensiva. La dependencia energética casi total de ambos sectores requiere, ha afirmado Zupiria, una revisión y un análisis de los protocolos y sistemas redundantes.
Ante esta reflexión, el Ejecutivo de Gasteiz propone una compra extraordinaria de gasóleo para garantizar el funcionamiento de los sistemas redundantes a los que tuvieron que recurrir los servicios públicos para seguir funcionando. «Estamos calculando el suministro que ayer fue necesario, lo que ha permitido que el sistema siguiera funcionando (…) Tenemos que hacer acopio de carburantes para estar preparados para una situación como esa», ha matizado Ubarretxena.
