Según un estudio sociológico encargado por la Diputación Foral de Bizkaia sobre los efectos de la pandemia, quienes residen en Bizkaia otorgan un 7,6 sobre 10 a la calidad de vida en Bizkaia pese al coronavirus y mantiene una expectativa de futuro positiva. La sanidad se convierte en el principal problema que afronta Bizkaia, según un estudio sociológico encargado por la Diputación Foral de Bizkaia sobre los efectos del COVID-19, seguida del fomento de la actividad económica y el empleo. Un 75% se considera suficientemente informado acerca de la situación producida por la enfermedad y entre el 23% que no se considera bien informado destaca como motivo principal la confusión o escasa claridad de la información. Los hogares y los espacios al aire libre se perciben como los lugares más seguros, mientras que los que se estiman más inseguros son el transporte público y los espacios interiores y cerrados. El 53,6% manifiesta no temer por su puesto de trabajo y el porcentaje de quienes dicen temer poco o nada por el futuro de la empresa en la que trabajan es del 51,4%. El Gobierno Vasco, la Diputación Foral de Bizkaia y los ayuntamientos reciben un aprobado por parte de la ciudadanía que, sin embargo, suspende al Gobierno del Estado (4,78 sobre 10) y a la Unión Europea (4,88).
La ciudadanía de Bizkaia considera que la sanidad y la lucha contra el coronavirus son los principales problemas y prioridades de gestión que deben abordarse en este territorio, según un estudio sociológico encargado por la Diputación Foral de Bizkaia ad hoc para conocer la repercusión en diferentes ámbitos de la pandemia y de la crisis generada por el COVID-19 y que se ha elaborado a través de 1.100 encuestas telefónicas realizadas entre el 21 y el 28 de septiembre. Este aspecto, el sanitario, desplaza así al del impulso de la actividad económica y el empleo, que se sitúa en segundo lugar entre las preocupaciones y prioridades ciudadanas en este sondeo, después de que en un análisis anterior, de junio de este año, fuera considerado como la principal inquietud.
Así, un 73,9% de las personas encuestadas considera que la sanidad es en la actualidad el principal problema del territorio, seguido por el impulso de la actividad económica y el empleo (70,7%), y a gran distancia se sitúan la educación (10, 7%), la inseguridad ciudadana (8%), las carreteras e infraestructuras (6,5%) o la política (6,5%). La ciudadanía se expresa en similares términos cuando se les interroga por el impacto personal de los problemas más relevantes en la actualidad, de manera que la sanidad (56,3%), el impulso a la actividad económica y el empleo (30,4%) y los problemas relacionados con el empleo (11,7%) definen las principales preocupaciones personales de quienes han participado en el estudio sociológico.
En cualquier caso, entre la población que trabaja actualmente en Bizkaia, el impacto laboral de la crisis sanitaria actual se percibe como bastante o muy elevado para el 26,1% de las personas entrevistadas, mientras que el porcentaje de quienes consideran que la pandemia impacta totalmente en su situación laboral es de 9,6%.
Además, el 27,8% de las personas entrevistadas que trabajan en la actualidad cuentan que su empresa ha recurrido a un expediente de regulación de empleo desde el inicio de la pandemia, una medida que ha afectado personalmente al 19%. A otro 8% el expediente de regulación de empleo iniciado por su empresa no les ha afectado personalmente. Entre quienes se han visto afectados personalmente, la probabilidad de vuelta al puesto de trabajo después de finalizar el expediente es elevada, de 7,67 puntos sobre diez.
Y aunque un 49,7% de la ciudadanía de Bizkaia que trabaja actualmente considera que la situación actual afectará al sector en el que se desenvuelve su empresa en los próximos seis meses (una de cada dos personas), el 53,6% temen poco o nada por su puesto de trabajo en ese mismo marco temporal. El porcentaje que sí teme por su empleo es del 22,5%. Además, la preocupación por la empresa en la que trabajan se expresa en similares términos: un 51,4% teme poco o nada por el futuro de la empresa, mientras el 21,9% teme mucho o bastante.
Esta actitud positiva se deja ver también a la hora de valorar la expectativa de futuro de Bizkaia, que en una escala del 0 al 10 califican con 6,01 puntos, y al calificar la calidad de vida en el territorio, que recibe un 7,6 sobre 10.
Y en cuanto a las proyecciones referidas a actitudes y expectativas en un futuro próximo, destaca una previsión significativamente mayor del uso del vehículo privado (7,42 en una escala en la que 0 significa ‘nada/mucho menos’, 5 ‘igual’ y 10 ‘mucho más’), la previsión de reducir el uso del transporte público (4,16), salir a comer o a cenar (3,86), viajar o acudir a espectáculos musicales, culturales y eventos deportivos (2,54).
La encuesta también analiza si las personas entrevistadas han padecido o no la enfermedad y la mayoría (el 67,6%) asegura tener conocimiento directo de casos a través de las noticias y medios de comunicación y sólo el 3,6% afirman haberse visto afectadas por la enfermedad, porcentaje que sube hasta el 14,3% cuando se trata de la afección a alguna persona de su entorno familiar directo.
Valoración de las instituciones
El estudio sociológico también interroga sobre la valoración que merecen las instituciones a la ciudadanía. Quienes han respondido a la encuesta otorgan al Gobierno Vasco un 5,78 sobre 10, a la Diputación Foral de Bizkaia un 5,69 y un 5,63 a los ayuntamientos, mientras que tanto el Gobierno del Estado como la Unión Europea no llegan al aprobado (reciben 4,78 y 4,88 puntos, respectivamente).
En términos globales, la gestión de la Diputación Foral de Bizkaia recibe una calificación media de 6,24 puntos y la valoración del Diputado General, Unai Rementeria, es de 6,04 puntos.
La sanidad (29,5%) y la lucha contra el coronavirus (17,5%), la reactivación del empleo (21,2%) y la economía (9,6%), la educación (12,1%) y las personas mayores y las residencias (11%) conforman las prioridades que la ciudadanía considera que deben aplicarse en la gestión que realiza la Institución foral.