El Departamento de Planificación Territorial, Vivienda y Transportes del Gobierno Vasco ha decidido incrementar un 10%, hasta los 650 euros, la renta máxima a percibir por las personas adscritas al programa Bizigune, que ceden sus viviendas vacías para alquiler social.
El objetivo final de esta medida, que entrará en vigor después de verano, es reducir el volumen de vivienda deshabitada que existe en Euskadi, que en estos momentos asciende a 15.149 viviendas, un 1,4% del parque de vivienda.
El programa Bizigune, que cuenta con un presupuesto anual de 33 millones de euros, ha experimentado un importante auge en los últimos años, pasando de 4.480 viviendas en enero de 2017 a las más de 6.600 que gestiona en la actualidad, lo que supone un incremento del 47% en cuatro años.