Con el objetivo de estabilizar la ladera afectada por los desprendimientos provocados por las intensas lluvias de finales de enero, la Diputación Foral de Gipuzkoa llevará a cabo una intervención de emergencia en la N-634, en el tramo entre Deba e Itziar.
Los trabajos consistirán en la retirada de materiales inestables, la instalación de un sistema de contención anclado al terreno y la construcción de canales de drenaje para reducir el riesgo de nuevos deslizamientos.
La inversión prevista es de 600.000 euros y el plazo estimado de ejecución es de tres meses y medio, hasta finales de mayo. Durante este período, la carretera permanecerá abierta con un carril y con paso alternativo regulado por semáforos.